El Paseo Ecológico de Benissa
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El paseo ecológico de Benissa en Alicante, es un sendero, si se quiere, corto pero bastante espectacular. Este transita entre hermosa vegetación, acantilados, escarpados y varias calas de las costas del mencionado municipio.
Famosamente conocido como el Paseo ecológico de Benissa consiste en un recorrido de unos 4 km aproximadamente por una pista muy bien diseñada y cuidada. Sin embargo algunos tramos para ingresar o salir de algunas calas se da por terrenos algo pedregosos o rocosos que sí requieren de algo de precaución y esfuerzo.
En esta oportunidad hicimos el itinerario El Paseo Ecológico de Benissa partiendo desde Cala Calalga hasta Cala Baladrar. Cerca de nuestro punto de partida se encuentra el muy famoso Peñón de Ifach, el cual, imponente, pareciera ser el guardián del sendero.
Aparcamiento en el Paseo Ecológico de Benissa, desde Cala Calalga.
Inicio del recorrido desde Cala Calalga
Dado que a lo largo de su recorrido nos encontramos con innumerables paneles informativos y explicativos es la ruta ideal para la práctica del senderismo interpretativo. Al tiempo que disfrutamos de los hermosos parajes, realizamos una actividad física y nos empapamos de conocimientos sobre la zona.
El Paseo Ecológico de Benissa es de muy fácil de recorrer, a ratos asfaltado a ratos de tierra, por lo que puedes transitarlo sin muchos problemas con niños. Sin embargo como tiene forma de “sube y baja” está plagado de escalones.
En consecuencia no es adecuado para carritos de niños o sillas de rueda. Durante su trayecto encontramos sitios con sombra, bancas y merenderos por si requerimos descansar, hidratarnos o comer algún aperitivo.
Para continuar con el Paseo Ecológico de Benissa, tenemos que seguir por la derecha.
También hay algunos restaurantes, chiringuitos y cafeterías en los que podemos disfrutar de la deliciosa comida mediterránea, refrescarnos o simplemente disfrutar de un café con vista al mar. Definitivamente un paseo muy agradable y con los servicios necesarios para disfrutarlo con la calma y paz que ofrecen las playas no urbanas o semisalvajes.
Datos de interés sobre El Paseo Ecológico de Benissa:
- No es apta para carritos de bebé.
- No es apta para personas con movilidad reducida.
- Distacia recorrida: 9.2 kms.
- Desnivel: 230 metros.
- Tipo de ruta: Circular.
- Dificultad: Moderada.
- Tiempo estimado: 3 horas , sin contar paradas.
- No hay que pagar tasa o impuestos.
- Es apta para niños, siempre que estén controlados por adultos.
- Es apta para nuestras mascotas.
- Haz clic aquí para ver el Aparcamiento.
- Durante el recorrido no hay ningún paso complicado o peligroso.
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Inicio del Paseo Ecológico de Benissa
Nuestro recorrido por El Paseo Ecológico de Benissa ha comenzado desde Cala Calalga, en la parte más sur de la costa de Benissa. Desde aquí se admira bastante cerca el legendario Penyal D’ifac o Peñón de Ifach, el cual se ubica en la fronteriza localidad de Calpe. Sólo la playa de la Fossa, de la vecina ciudad, nos separa de éste. Sin embargo puede ser apreciado durante casi todo el tramo del Paseo Ecológico de Benissa.
Cala del Marroquí.
Un panel nos recibe con información de la Cala de la Calalga y de la importancia y ventajas que ofrecen las playas no urbanas. También nos instruye sobre lo que significa cada aviso que conforman la señalización y, en general, de la vegetación que caracteriza a estas aguas litorales.
Descendemos por una rampa de tierra y arena con baranda de madera hasta esta cala que tiene muy poca orilla. Más que todo grava, acantilado, rocas y vegetación conforman la orilla de esta cala. Sin embargo desde ahí la vista de toda la costa de Benissa y del Mediterráneo es espectacular, así como del Peñón de Ifach.
Hacia el Puerto de Bassetes pasando por Cala del Mallorquí
Cala Bassetes, el Paseo Ecológico de Benissa
Subimos y tomamos por una carretera asfaltada hasta llegar a un desvío que colinda con una casa en una esquina. Tomamos por la derecha, siguiendo las indicaciones de un panel que nos orienta hacia el Paseo Ecológico de Benissa que conduce a Puerto Bassetes.
Este sendero de tierra está ubicado –inicialmente- entre algunas viviendas por su lado izquierdo y por la derecha el acantilado con barandas de madera que está adornado con tejos y mostajos. Vegetación que, aparte de hermosa, es abundante por toda la costa.
Hablando de vegetación, desde arriba se observa la que es característica, no sólo de estas costas sino del mar Mediterráneo: la Posidonia oceánica. Una planta que con sus flores y hojas tiene sus praderas dentro del mar.
En esta cala, hay un restaurante donde poder disfrutar de este impresionante lugar.
Llegada a Cala del Mallorquí próxima al Club Náutico Les Bassetes
En el camino nos encontramos con otra cala bastante salvaje como la anterior, se trata de Cala del Mallorquí, la cual queda al fondo de un barranco y parece haber sido formada por un mordisco de la naturaleza.
Su orilla, cortita también, está compuesta de grava, piedras, rocas y un acantilado que está coronado por tejos, palmeras y mostajos, algunos de los cuales descienden por éste.
Y hablando de descender a esta cala se baja por unas escaleras que parecieran estar a medio hacer. Pero vaya! es que la formación rocosa en un momento es tan complicada, que no dio para más y algunos escalones cedieron.
El peñón de ifach, siempre impresiona.
Así que decidimos subir y seguir nuestro paseo por el sendero original. Luego de unos pasos avistamos el Club Náutico Les Bassetes que es un pequeño puerto que ofrece restaurante, cafetería y duchas, entre otros servicios.
Aunque es bastante agradable lo toreamos por la izquierda y subimos por una carretera que nos conduce hacia un sendero angostito, pero muy bonito que se encuentra entre montañas y árboles. Desde ahí se observa el Puerto Les Bassetes en todo su esplendor. Este sendero nos lleva hasta la hermosa Cala Les Bassetes.
Les Bassetes: la más extensa de todas las calas
Efectivamente, esta es la más extensa de todas las calas que conforman el litoral de Benissa. Dada su extensión se puede disfrutar en ella de prácticamente todas las características geomorfológicas que posee esta costa. Allí vemos enormes formaciones rocosas dentro del mar, amplias praderas de Pasidonia oceánica, arena dorada, grava, acantilados, bosques de pinos, en fin, prácticamente toda la vegetación y formación características del litoral de Benissa. Además ofrece estupendas vistas tanto hacia la parte norte como sur de la costa.
Oficina de turismo, el Paseo Ecológico de Benissa.
Merendero y Centro de Información Turística del litoral de Benissa
Luego de visitar la hermosa y extensa cala de Bassetes retomamos el camino y, a pocos metros de allí, nos encontramos con un hermoso merendero de la costa de Benissa rodeado de tejos y mostajos.
Este está provisto de mesas, bancos y recipientes para los desperdicios. Es un sitio ideal para descansar, refrescarnos o comer un aperitivo mientras disfrutamos de toda la belleza que nos brinda el paisaje.
Saliendo del merendero nos encontramos el Centro de Información Turística de Benissa Platja que, por los momentos. Este cuenta con un aparcamiento más o menos amplio para un buen número de coches. Allí hay un panel con toda la información del Paseo Ecológico Benissa desde Cala Bassetes hasta Cala Baladrar.
La Cala Pinets, es la playa que yo recomendaría. Es la que más me gustó. La flecha indica mesas y bancos de madera, además del camino a seguir.
Una playa o cala con mucho encanto
Descendemos por unas escaleras de concreto y barandas de piedras y un poco más allá divisamos la playa de La Fustera a cuyo fondo, desde la perspectiva en que nos encontramos, se ven unas edificaciones habitacionales.
Al llegar a la playa notamos que cuenta con un parking amplio, muchos y variados servicios, así como un chiringuito. En su costado norte hay un pequeño bosque al lado de un acantilado que está provisto de mesas para picnic.
Esta es una muy buena opción para el que quiera comer allí y disfrutar de la vista que ofrece la cala. Esta playa está distinguida con la Bandera Azul por lo que suele ser bastante concurrida.
A partir de la Cala Pinets, para los no acostumbrados a los senderos, el camino se complica un poco.
Cala Pinets en el Paseo Ecológico de Benissa
Luego llegamos a otra cala bastante hermosa y salvaje, rodeada de pinares y acantilados con fondos bastantes rocosos, pero ideales para el buceo. Nos referimos a Cala Pinets. Desde aquí se puede pasar a otra pequeña cala por entre unas formaciones rocosas. Digamos que son dos calas en una.
Abandonamos Pinets y subimos por unas escaleras para continuar el Paseo de Benissa hacia nuestro próximo destino: la Cala de la Llobella.
Desde la lejanía se puede ver el recorrido por la Cala Llobella.
Si buscas tranquilidad: Cala de la Llobella
Luego de abandonar Cala Pinets un poco más adelante, y tras bajar por una zona rocosa, algo complicada de sortear, encontramos la Cala de la Llobella. Esta cala es poco visitada, por su difícil accesibilidad, por lo que es ideal para quienes buscan paz y ambientes tranquilos.
Aunque esta cala es bastante pedregosa desde su interior ofrece vistas espectaculares. Hacia arriba, por su parte interna, se aprecia un hermoso contraste entre un pequeño bosque de palmeras y pinos con un acantilado dorado.
Abandonamos esta cala subiendo por un camino bastante pedregoso pero muy bonito, ubicado entre rocas y vegetación frondosa.
La cala Advocat, nos dió más una sensación de un pequeño puerto.
Cala Advocat: ideal para niños
Retomamos el camino del paseo, esta vez de tierra con abundante vegetación a su lado y algunas paredes de edificaciones a su costado. Nos encontramos con un muy llamativo muro empedrado en el que se anuncia el Paseo Ecológico de Benissa y la Cala Advocat.
Seguimos por la pista de grava y tierra entre frondosa vegetación. Tomamos un sendero hermoso entre un bosque de pinos. Este es uno de los senderos más bonitos de todo el recorrido porque no tiene construcciones a su lado, al contrario del resto del tramo.
Llegamos a un mirador desde donde se aprecia la hermosura de la Cala Advocat, la cual se distingue de las demás porque posee un espigón. Para llegar hasta ella bajamos por el camino entre pinos hasta empatar de nuevo con un sendero entre construcciones y barandas de madera.
Es una cala que, por el rompeolas, no es muy honda, ideal para niños y con vistas estupendas tanto hacia el norte como hacia el sur y un hermoso y enorme acantilado coronado con pinos. Cuenta asimismo con un parking para unos pocos coches.
En cala Baladrar, hay un pequeño aparcamiento y también una zona con mesas y bancos de madera.
Cala Baladrar: Fin del recorrido
Para dirigirnos hacia nuestro destino final (Cala Baladrar), tuvimos que salir a la carretera porque es la única de las calas que aún no tiene conexión por el Paseo.
Se trata de una cala bastante extensa y muy bonita, rodeada de enormes acantilados y toda esa vegetación y formaciones marítimas que encontramos a lo largo de nuestro recorrido.
Termina así nuestro itinerario por una de los senderos más hermosos de la Costa Blanca Mediterránea: la Ruta Ecológica de Benissa.
Cala Baladrar, el sonido de las piedras te dejarán hipnotizado.